Musgo y Rastita

En el centro de la plaza principal de Cafayate reside Rastita, un pequeño perrito color crema, con una discapacidad en una de las patas de atrás, lo que no impide que se acerque semi arrastrándose a recibir afecto. Poca gente se anima a tocarlo, porque su pelo es una maraña rastosa, pero nosotros igual pegamos onda con él, porque somos puro amor. Todos se reían del pequeñito, pero nosotros le entregamos parte de nuestro corazón cuando se nos acercó con su dulce expresión. Acá nos ven con él, que en el momento del flashazo tiró su mirada de rayo láser, para devolverle gentileza a un chico que se reía de su fallida patita.

A la derecha de la imagen vemos a Musgo, quien luego resultó ser Musga, lo bautizamos así porque Sol, en un ataque de Fernet dijo que el pasional animalejo tenía la cara verde. Musguita nos quiso de movida y si alguien se nos acercaba se le iba al hilo. Qué animal tan cariñoso. Tenía el pelo lacio en el cráneo y el cuerpo como con rizos de Sedal. Debo comentar también que daba la patita.

Acá estamos las 4 chichis juntas, felices porque el camino nos haya encontrado.



Después de pasar un rato juntos en la plaza Musgui se fue a su casa. Pero el día que nos fuimos, a las 5 a.m de Cafayate estaba en la terminal para despedirnos. Fue emocionante.